Se verán obligadas a realizar un reajuste y asumir un encarecimiento en los costes de pedidos.Cada vez que se mueve ficha en el tejido industrial del Polo se pone en peligro un nuevo hilo de la maraña que se teje entre las empresas que lo componen. A primera instancia, la parada de Ercros las dejará desabastecidas; principalmente de sosa, un producto del que se surte prácticamente la totalidad de compañías, para utilizarlo como materia prima o como producto auxiliar en el tratamiento de agua, al margen de usos más específicos.
El listado de clientes de las tres plantas de Ercros Palos incluye más de un centenar de empresas, ubicadas en Andalucía, fundamentalmente, Ciudad Real, Extremadura, Madrid, Murcia, Cataluña, Vizcaya, Toledo, Canarias, León y Portugal. En Huelva, al menos nueve fábricas aparecen en ese catálogo: Atlantic Copper (a la que se le suministra sosa cáustica) BioOils (ácido clorhídrico y sosa cáustica), Cloresur (hipoclorito sódico), Fertiberia (sosa cáustica), FMC Foret (ácido clorhídrico y sosa cáustica) Indigosa (hipoclorito sódico), Tioxide (sosa cáustica), Tracemar (sosa cáustica) y Algry Química (ácido clorhídrico y EDC). Una relación que se amplia a casi la totalidad de las empresas del Polo, según fuentes de AIQB.
El parón de Ercros les obligará a reajustar su actividad y a buscar otro proveedor (fuera de Huelva), con el consiguiente incremento en el precio de la materia (este ajuste llega en un momento de crisis en el que cualquier coste adicional se convierte en un nuevo golpe a la estabilidad industrial). La situación podría recrudecerse en el caso del suministro de un derivado muy específico que se produce en Ercros (tanto en Huelva como en Tarragona) y que necesita Algry Química, el EDC, lo que la convierte en la firma que potencialmente más puede sufrir los efectos de la parada. La planta de Palos de la Frontera en la que se produce se construyó en 1.998. Parte del EDC obtenido en estas instalaciones se transporta, vía marítima, al centro industrial de Aiscondel en Vila-seca para producir VCM (PVC), el resto se destina en gran medida a la exportación. Además se utiliza como producto intermedio de disolventes clorados, como agente endulzante en gasolinas antidetonantes, en eliminadores de pinturas, barnices y acabados, como desengrasante de metales, en jabones y compuestos desengrasantes, como agente humedecedor y penetrante, en síntesis orgánica, en flotación de menas, etc.
El resto de empresas depende de la sosa cáustica, uno de los productos químicos con mayor presencia en la actividad industrial (síntesis química, textil, jabones y detergentes, papel, productos de limpieza, o neutralización de residuos ácidos).
Además de los problemas que el cierre de las plantas de Huelva dejará en el suministro industrial, desde diferentes ámbitos (políticos, empresariales y sindicales) se advierte del peligro que corren no sólo los 123 puestos de trabajos directos, sino los casi 300 a los que se llega al considerar que otros 170 se generan de forma indirecta por la actividad de las tres plantas.
A la espera de un acercamiento con la dirección de la compañía (sólo se han mantenido dos reuniones en Huelva, las que ha mantenido la dirección de Palos con el delegado del Gobierno andaluz, Manuel Alfonso Jiménez, y con la delegada de Empleo, María José García Prat), los trabajadores volvieron a salir a la carretera ayer para mostrar su rotundo rechazo al cierre anunciado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario