El presidente de AIQB considera que no hay signos que apunten al cierre de alguna fábrica por el momento (aparte de Ercros) · La deslocalización es una amenaza, pero no en la actualidadEl presidente de AIQB, Gerardo Rojas, en la azotea de la sede de la Federación Onubense de Empresarios, donde están las oficinas de la Asociación.
En un momento convulso para la industria onubense, con varios expedientes de regulación de empleo planteados y un cierre planeando sobre el Polo, el presidente de la Asociación de Industrias Químicas y Básicas de Huelva, Gerardo Rojas, se muestra medianamente optimista. Reconoce las dificultades en la aglomeración industrial, pero también mira con esperanza los indicadores de recuperación. Pese a ello, admite, quedan malos momentos por llegar.
-¿Cómo definiría la situación actual del Polo Químico?
-El Polo está pasando por el momento más difícil desde su creación. En general, toda la industria está igualmente afectada.
-Entonces, no hay ningún elemento diferenciador.
-Ningún elemento fundamental. También depende de qué sectores tengas, hay productos que han bajado menos, incluso dentro del mismo producto hay tipos específicos para determinadas aplicaciones que sufren más que otros. Si da la casualidad de que se juntan en un polo los productos que más han sufrido ese polo puede padecer más que otro.
-¿Eso está pasando en Huelva?
-También tenemos la suerte de tener un porcentaje de industria no estrictamente química que está mejor posicionada ante la crisis, como la energía o el refino. Huelva tiene factores negativos, pero también la compensación de que al ser un polígono muy diverso hay industrias que no están tan afectadas. Hay industrias en las que ni se ha hablado de ninguna medida que afecte al empleo ni se va a hablar. Tenemos la cara y la cruz.
-Pero entre las afectadas se habla al menos de un cierre. ¿Puede que haya algún otro?
-No que yo pueda prever en este momento. También es verdad que cada día, y cada uno lo valorará como quiera, hay más signos de recuperación de la economía. Nos queda mucho por pasar y por pasarlo mal, pero estaría más preocupado si no hubiese esos signos.
-La recuperación llegará más tarde a la industria de cabecera, al igual que la crisis.
-Pero no es lo mismo lo que puede sufrir financieramente una empresa y el apoyo de los accionistas ante una perspectiva de recuperación, aunque sea a medio plazo, que si esa perspectiva no existe. Igual que los consumidores finales gastan más o menos en función de su índice de confianza y no de cuánto tengan en su cuenta corriente, los inversores también son gente y dependiendo de la confianza que tengan en la evolución de la economía, así invierten.
-Las graves dificultades por las que pasan algunas fábricas, ¿no son una señal de que podrían estar quedando obsoletas?
-Eso va a depender mucho de los mercados y el desarrollo tecnológico. Si para fabricar un producto que se elabora en Huelva surge un nuevo proceso que se implanta en países que compiten con nosotros, o que ya están buscando la implantación porque hay un clima favorable a la actividad, podría propiciar que las industrias que tienen 25 años estén fuera de juego. Pero no es algo que se pueda contestar sí o no si no nos referimos a escenarios concretos. Depende de muchas variables.
-Ahora mismo tenemos un escenario concreto.
-Tenemos lo que tenemos que no es poco. Una fábrica que anuncia un cierre, otra planta con un horizonte temporal de 2012 para finalizar al menos una parte importante de su actividad. Y de lo demás no se está hablando. Ya hace 15 años había gente que decía que veríamos desaparecer muchas fábricas y probablemente no se referían a las que hoy están en peores condiciones.
-¿A qué se refiere entonces el efecto dominó del que tanto ha hablado la industria?
-El efecto dominó significa que con el cese producción de ácido fosfórico las plantas que están relacionadas con ese producto, como Nilefos o Foret, han tenido que plantearse un cambio en la forma en que se suministran. Ese cambio poco a poco se va resolviendo mediante actuaciones de tipo comercial y técnico y siempre mediante el pago de un extra coste, lo cual debilita su posición. No significa que no sean capaces de superar esa situación.
-¿Corremos el riesgo de deslocalización de algunas empresas?
-No lo creo. Hay que distinguir deslocalización, un negocio que se mueve para mejorar resultados, del cierre de una actividad que ha cumplido su ciclo de vida en el mercado. La deslocalización no es lo más preocupante en este momento aunque en términos generales sí es una amenaza que viene de la mano de las condiciones que nos hemos impuesto en Europa para moderar nuestras industrias.
-El consejero de Empleo afirmaba hablando del Polo que la Junta no permitirá que todas las empresas de un territorio se pongan de acuerdo para presentar ERE.
-Yo soy más pragmático que todo eso. Hay que revisar la situación de las empresas cuando empieza un problema antes de alcanzar el punto de no retorno, y para eso las empresas tienen que tener libertad para plantear limitaciones en el ámbito laboral. Y sobre esos planteamientos, no demasiado tarde, la administración sólo tiene que mirar con lupa en función de lo que marca la ley. Si la empresa plantea algo de acuerdo con la ley no puedo entender que por otro tipo de consideraciones a priori se diga esto sí, esto no.
-La Diputación promueve un pacto para defender la imagen de Huelva que responde en gran medida a una reivindicación eterna de la industria.
-Nosotros hemos dicho muchas veces desde hace años que ante determinados ataques fuerzas políticas y sociales de Huelva debían unirse en un sólo cuerpo, que lanzase un discurso diciendo esto es mentira y no lo vamos a consentir. Pero la industria no está incluida.
-¿Por qué?
-Me preocupa mucho, pero tengo que recurrir al peso de las connotaciones a la hora de hacerse la fotografía al lado de un sector al que todavía de vez en cuando se le quita de la foto, sin que sepamos muy bien por qué. La industria se ha sorprendido de que no figure en el texto, cuando como mínimo ha sido el elemento aludido en esos ataques. Nos extraña que no se defienda la imagen de ese sector industrial que cumple la legislación exactamente igual que cualquiera.
-¿Qué opina AIQB del estudio epidemiológico que se pide para Huelva?
-Cuando observamos el mapa de las enfermedades de la provincia vemos que hay unas predominantes y otras no, igual que en todas las provincias. No es que estemos en contra de ese estudio, es que falta la evidencia de la necesidad. Eso sí, prefiero que el dinero de ese estudio se gaste en mejorar las conexiones ferroviarias entre Huelva y Sevilla, por ejemplo.
Leer mas....
No hay comentarios:
Publicar un comentario